No había una vez
Un pequeño y gran contraste de uno de nuestro orgullo guatemalteco como lo es el himno nacional con la vida real de un chapín.
Una crítica de similitudes hacia los ricos y políticos de nuestro país, las dos caras de la moneda hablando de un pueblo en extrema pobreza viviendo bajo la oligárquica de un grupo de persona que sirven del poder para obtener sus objetivos .
Con una buena comparación Pues tus hijos valientes y altivos forjaron civilizaciones de agricultores, cazadores, artesanos, militares y artistas construyendo hospitales , escuelas, carreteras y eso estando el extrema pobreza.
Y para los Tiranos que escupen tu faz un pequeño círculo que consiste solamente en una finca, una cementera , una embotelladora de cerveza y una venta de pollo frito sin mencionar unos negocios de los cuales consumimos todos los guatemaltecos.
Y como bien dicho esta NO HABIA UNA VEZ NI OTRA VEZ .
Michelle Muñoz
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